Preferencias y Comparaciones

Lo peor que le podemos hacer a un ser humano y más a un hijo es preferir uno sobre el otro. A lo que me refiero es que hay personas que se empeñan en hacer sentir mal al otro por solo preferir a uno. El amor de un padre es incondicional no hay porque amar más al primero que el segundo y viceversa, porque yo he pasado por eso, que un familiar prefiera a mi hermano que a mi. 

Si queremos que nuestros hijos sean los mejores no debemos comparar a nadie, porque lo único que se ocasiona es hacer sentir mal a la persona. Las comparaciones no sirven para hacer que un ser humano quiera ser mejor. Si yo le estoy reclamando a mi hijo de por qué no es cómo su primo, dudo que él quiera ser como él, al contrario la va a tener rencor porque sus papás no pueden ver lo bueno de su hijo. La única manera en la que podemos hacer que nuestros hijos sean mejores es de la siguiente manera: Hay que recordarle a nuestro hijo lo que es capaz de hacer y preguntarle ¿Qué es lo que mi súper hijo es capaz de hacer el día de hoy? El punto de esto es hacer ver que nuestro hijo puede hacer más y que si quiere hacerlo puede ser mejor. Hay que incitarlo de una buena manera a ser mejor, remarcando sus cualidades. 

No solo hablando de los hijos, el comparar y preferir es malo en sí, es un acto que daña al otro ser humano. Debemos dejar de comparar ya sea a dos personas o compararnos a nosotros mismos. Cada uno es único y no tiene porque ser como el otro. 

Dejemos de preferir, no se trata de siempre estar arriba y aplastar a alguien, se trata de que entre todos nos ayudemos y salgamos adelante. Las preferencias y comparaciones nunca serán el camino para que alguien sea mejor. 

                                           

Ni el primero ni el último

"Persigue la excelencia y el éxito te seguirá" ¿Alguna vez se te ha ocurrido que para poder ser exitosos debemos perseguir la excelencia? La primera vez que escuché esta frase me hizo darme cuenta de varias cosas. ¿Cuántas veces buscamos ser mejor que el otro? ¿Cuántas veces queremos derrotar al de a lado? Y no, la vida no se trata de ser mejor que el otro o estar arriba de alguien, el punto de la vida es buscar la excelencia para ser mejores que nuestro yo de ayer. Ese es el punto, buscar ser los mejores para nosotros mismos. 

Nos dividimos para ver quién es el mejor, para ver quién tiene más dinero, simplemente nos clasificamos cuando nunca debería ser así. ¿Cuál es el punto de aplastar a alguien para poder llegar a la cima? Eso está mal y aquella persona que para alcanzar el éxito crea que esa es la forma correcta no es exitosa realmente.

La palabra excelencia se refiere a algo que excede, eso es ser excelente exceder en hacer las cosas bien, en buscar lo mejor para uno mismo y tener la capacidad de ayudar y demostrar a los demás cómo se hacen las cosas. 

Aquel que siempre piensa que ganar significa derrotar al de a lado está en lo incorrecto. Serás el mejor en las cosas que tengas pasión por, por las cosas que sabes y estas deseoso de aprender, por el mero hecho de querer conocerlo. No busques siempre en la puntuación, ni en los números, éstos son abstractos, mero invento nuestro. Para ser mejor hay que luchar con nuestro yo interno y con nadie más. Deja de comparar, de clasificar y aplastar, ese no es el camino. "Mírate al espejo, esa es tu competencia."

Tú talento

Todos nacemos con una habilidad especial o que se nos da naturalmente, algunos nacen con una voz increíble, otros con una flexibilidad justa para gimnasia, otros con una coordinación exacta para seguir cada paso de una coreografía, algunos otros con un oído tan preciso para diferenciar cada nota en la escala musical y otros tantos con unas manos dichosas de dibujar cada detalle de un rostro. Sea cual sea ese talento con el que nacimos todos tenemos uno sin falta, sólo necesitamos encontrarlo, ver qué es eso que sabemos hacer naturalmente y una vez que lo encontramos desarrollarlo. 

Aunque en el camino a poder encontrar cuál es nuestro talento natural podemos toparnos con muchos obstáculos, un claro ejemplo es que probamos con otras habilidades, es decir, intentamos bailar pero no tenemos coordinación alguna o intentamos cantar sin embargo nuestra voz no es afinada y te voy a ser sincera cuando intentamos este tipo de cosas y no somos buenos del todo solemos decepcionarnos aunque déjame te digo que esto no significa que no seamos capaces de desarrollar cualquier habilidad y ser muy buenos en ella, es solo que hay una que ya somos buenos en. Y no debemos desesperarnos o rendirnos, debemos seguir buscando y buscando hasta que la encontremos. 

Ya que la encontramos haz de ella tu aliada, tu fuerza, lo que hace que tú seas bueno y nunca nunca dejes que te juzguen por ser mal  bailarín cuando tu verdadero talento es pintar. Cada quien tiene un talento, usa el tuyo como tu herramienta de vida y saca provecho de cada cosa que hagas con él.

                              

            

Aprovecha el momento

Hace poco leí en un blog el verdadero significado de la madurez el cual dice que "la madurez es la habilidad de poder vivir en el pasado, el presente y el futuro al mismo tiempo". Lo cual hizo darme cuenta de que esa es la mejor forma de vivir, porque no se trata de estar sólo enterrados en el pasado o vivir en el sueño de cómo será nuestra vida dentro de 5 años, al contrario se trata de aprovechar el momento de tal manera que no olvidemos nunca nuestro pasado para no repetirlo, estemos viviendo el ahora con intensidad y el futuro lo manejemos con la palma de nuestra mano. Es decir, poder estar en el ahora y disfrutarlo, asimismo, como entender que el ahora es producto de las acciones hechas y nuestro futuro está a la vuelta de la esquina esperando a ser construido a través de nuestras acciones del ahora.

Aprovecha el hoy y aprende a vivir con madurez, no te claves en un tiempo, imagina que estás en una fina línea en la cual puedes mirar hacia atrás y hacia adelante pero siempre caminando consciente de que esas dos partes te siguen a donde vayas. Y que la vida no se detiene, por nada ni por nadie, es por eso que hay que fluir dejar que las cosas pasen y fluir nosotros con ellas para hacerlas mejores. 

Tienes 24 horas cada día para aprovechar cada cosa que haces, para encontrarte a ti en el ahora sin dejar de imaginar o soñar, solo vivir y disfrutar lo que te pasa en este instante. 

 

 

Por cada NO existe un SÍ

La vida en infinidad de ocasiones nos dice no, nos dice no cuando fallamos, cuando no obtenemos aquello que queremos, cuando no ganamos ese concurso soñado o cuando esa persona no es la indicada. Aunque la verdadera razón por la que la vida nos dice "no" es para que esperemos y recibamos ese SÍ tan inesperado, porque muchas veces cuando la vida nos dice no creemos que es por una mala razón cuando no es así, es para que la vida nos recompense con una nueva oportunidad, con lo que necesitamos, porque en nuestra búsqueda de nuestro mejor "sí" vamos a encontrar otras cosas maravillosas, otros sí por decirlo de alguna manera. Yo me he dado cuenta de que eso es lo que me pasa específicamente a mí, que cuando yo tengo mi fe en algo que estoy segura es para mi, la vida me dice: Hey, espera aquí no está lo que tú necesitas. Y claro, como cualquier ser humano, me decepciono y desilusiono, sin embargo, tiempo después las oportunidades aparecen y me llevan a otro camino que resulta ser mejor de lo que yo tenía planeado. Aquí conecto mi post anterior de "Espera lo inesperado" porque cuando estamos mal por haber recibido un NO el siguiente SÍ viene de forma inesperada.

El que te rechacen no significa que eres menos o que eres malo, significa que no es para ti. Hay un momento y tiempo para todo, para ser rechazado y para ser aceptado. No te rindas nunca, no te decepciones, no pierdas la fe, porque lo mejor te está esperando sólo hay que aprender a ser pacientes para recibirlo.

Porque es verdad y yo lo he comprobado: POR CADA NO QUE LA VIDA NOS DA EXISTE EL SÍ PERFECTO.

La edad no importa

¿Cuántas veces hemos dejado de hacer algo por ser demasiado pequeños o muy grandes para hacerlo? ¿Cuántas veces dejamos que la edad nos detenga de nuestra meta? La realidad es que el momento perfecto no existe nunca, nunca se es demasiado pequeño para iniciar algo grande o se es demasiado “viejo” para cumplir otra meta. Te contaré mi experiencia este semestre. Yo soy una persona a la que le gusta tomar riesgos y ponerse metas nuevas así que para este semestre me propuse hacer muchas cosas nuevas totalmente fuera de mi zona de confort y todas y cada una de ellas las cumplí y me di cuenta que lo que estaba haciendo casi nadie de mi edad lo hacía, estoy emprendiendo proyectos grandes y he encontrado poco a poco caminos que me llevan a cumplir mis sueños. ¿Pero, por qué estoy progresando tanto? Porque estoy tomando acción, no dejo que mi edad me detenga para poder llevarme con personas mayores que yo, al contrario saco provecho de ello. No creas que no tienes edad suficiente para iniciar un nuevo proyecto o para compartir tus ideas al mundo al igual que nunca se es demasiado grande para seguir intentando, es por eso que estamos aquí para aprender y seguir experimentando. Qué más da la edad que tenemos, lo que cuenta en la vida es la actitud y ganas de hacer las cosas. Atrévete, no dejes que tu edad te limite y te reto a que emprendas un nuevo proyecto, generes una nueva idea y nunca dejes de crear. Cuando la gente te vea y se dé cuenta que nada te detiene y que sigues adelante a pesar de cada cosa sabrá que el éxito forma parte de ti. Intenta, experimenta, crea y nunca creas que tu edad no es la adecuada. 

            

Aprende de cada cosa

Esta semana estuve muy enferma, como hace mucho no me pasaba y bueno creo que recibí una lección importante con eso, aprendí a esperar, porque yo no soy una persona paciente, me cuesta mucho esperar sin hacer nada y pensar que no he perdido mi tiempo, pero esta vez tuve que esperar por todo, esperar a que me atendieran en el hospital, esperar a que me dieran los resultados de mis análisis, esperar a los especialistas, esperar a que me dieran un diagnóstico, esperar a que me dejaran ir a casa, esperar mis medicinas y esperar a que me sintiera mejor. Para mí, en lo personal fue mucha espera, más de lo que a diario suelo esperar pero aprendí a hacerlo y traté de verle el lado bueno a las cosas, ahora aunque no lo creas, ya no veo tan mal esperar, ahora sé que esperar es parte de la vida porque así es. La vida es una constante espera. 

Así que como yo aprendí una valiosa lección y no sólo una sino varias de mi enfermedad, no hay mejor cosa que aprender de todo lo que nos pasa, porque todo pasa por una razón, una razón que incluye aprender de ella, porque si no queremos cometer el mismo error dos veces no hay mejor cosa que aprender la lección de cada experiencia vivida. Vive pero aprende mientras vives, deja que la experiencia hable por ti y cada vez que te ocurra algo descubre qué cosa nueva puedes aprender de eso, porque cada día se aprende algo, de lo bueno y de lo malo. Vive, experimenta y deja que la vida misma sea tu maestra.