¿Alguna vez te ha pasado que quieres que te ocurra algo, como que ganes una beca, un concurso o que llegue la persona indicada pero simplemente eso no pasa, no pasa de la manera correcta? A mí me ha pasado más de una vez, me pasa que tengo la esperanza que algo pase pero lamentablemente no sucede. Y me he dado cuenta de algo muy importante y más ahora, en esta semana, me he dado cuenta que al desear o esperar tanto algo lo alejamos, sí, aunque no lo creas, cuando alguien desea o espera mucho algo luego comete acciones erróneas que hacen que nos alejemos de nuestro objetivo deseado, por lo que es mil veces mejor dejar que las cosas fluyan, es decir, que se den por sí solas, no te estoy diciendo que si deseas algo no tomes acción para conseguirlo, sino lo que quiero decirte es que lo que tienes que hacer es trabajar a tú manera y esperar que la cosecha crezca por sí sola a su tiempo. Porque mira, cuando siembras una planta lo único que está bajo tus manos es, en primer lugar, sembrarla y una vez sembrada lo que debes hacer es regarla y darle los nutrientes necesarios para que crezca, pero el cómo crece y cuánto tarda no depende de ti, depende de la planta en sí y así es en la vida, nosotros debemos poner la semilla y regarla, sin embargo, debemos tener paciencia para que vaya creciendo por sí sola. Ahora vamos al punto de lo inesperado, en esta semana me han sucedido cosas hermosas y todas y cada una de ellas no esperé que sucedieran y ahora me dirás qué relación tiene esto con lo de sembrar, pues muy fácil, lo que debemos hacer en la vida es sembrar sin esperar nada a cambio y la planta por sí sola nos irá regalando las cosas más preciadas.
No esperes que las cosas sucedan como consecuencia de tu trabajo, no esperes, porque lo inesperado está la vuelta de la esquina con el mejor regalo listo para ser entregado. No hay mejor cosa que recibir algo que no tenías en mente, algo que no estaba en tu lista y así el regalo tendrá mucho más valor.
Trabaja, siembra, riega y deja que las flores broten por sí solas y te aseguro que así tendrás las rosas más rojas de la cosecha.
Yo no espero nada a cambio, sino espero lo inesperado.
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